lunes, 22 de julio de 2013

Así es ella

Dos grandes poetas de una misma época y de distintos continentes: Elvio Romero, de Paraguay y Rafael Guillén, de España, ambos, a su manera, poetizando sobre el amor, sus consecuencias y el sentido de la vida.

                                           

                                                  "No le digas a nadie
                                                   que he vuelto a tus jardines
                                                   escóndeme bajo tu cuello de ángel
                                                   en tu pelo de bruma
                                                   en tus ojos de marzo"



ASÍ ES ELLA, ME DIJE    poesía de Elvio Romero

Así es ella, me dije; es la alegría
remota y honda que pronto llega
a despejar el nudo que se debe
desnudar en la penumbra inquieta.

Noche y albor, me dije,
todo llegó a mi corazón por ella;
llegó el sabor oculto del deseo,
el presagio de ardor que en mí resuena.

Es mi cuerpo, me dije,
reconociendo su esplendor en ella,
el bosque entero de mi sangre, el pulso
y el latido secreto de su fuerza.

La imagen que conservo
de las verdes raíces de mi tierra;
ella es el tiempo mío, el del verano
en el regazo inmóvil de la siesta.

Así mismo, me dije,
en su fulgor herido en la belleza,
ella es el largo trecho recorrido
surtiéndose de entraña y sementera.

Ella es así, me dije,
callado abrigo que abrigó mis huellas,
el justo sueño que escogí en la lucha,
la libertada por la que canto es ella!-


                                                  Elvio Romero (Paraguay, 1926)



CADA MAÑANA     poesía de Rafael Guillén


Cada mañana el mismo
asombro, siempre nuevo:
el ver lo natural
que es para ti tu cuerpo.

Consabidas minucias
del rito del aseo,
que imperceptiblemente
elevas al misterio.

Desde mis ajimeces
vigilo tus linderos:
revueltas como un ángel
sobre tus mismos pechos.

Tu humedad se disputan
la juncia y el espliego.
¡Ay frescura de aljibe
y calor de sesteo!.

En mis blandas murallas
aprisionado, veo
el hábito sencillo
que tienes de tu cuerpo.

Resuelves la materia
en puro movimiento;
cada escorzo insinúa
un ritmo en el espejo.

El repetido aire
que modela tus gestos,
es en ti cristalino
pero en mí es espeso.

De tu cuello desnudo
nace un hondo venero;
de tus brazos en alto,
la mimbre de tu pelo.

Al alba, cuando mido
tu distancia, no entiendo
la natural costumbre
que es para ti tu cuerpo.-


                                       Rafael Guillén (España, 1933)




Imágenes: pinturas del artista francés Claude Monet (París, 1840- Giverny, 1926)


Publicación de Quique de Lucio para "Nos Queda
la Palabra"
quiquedelucio@gmail.com
twitter@quiquedelucio

No hay comentarios:

Publicar un comentario